Cambio climático: menos insectos al despertar la primavera
Un reverdecimiento y un florecimiento más tempranos de la naturaleza en primavera pueden provocar una disminución de los insectos, sobre todo en los bosques, según un estudio. "Es probable que el calentamiento global contribuya en parte a la drástica disminución de insectos por esta vía", escribe el equipo de investigadores del sur de Alemania en la revista Communications Biology.
La causa radica en la interacción: si las larvas de insectos herbívoros eclosionan mucho antes de que salgan las hojas, corren peligro de morir de hambre. En cambio, si eclosionan mucho después, la calidad del alimento puede ser notablemente inferior, ya que las hojas frescas son las más digeribles y ricas en proteínas y suelen contener menos sustancias protectoras.
Las copas de las hojas tienden a ser más densas
Otra posible explicación es que cuando los árboles reverdecen antes, sus copas tienden a cerrarse y a dar sombra a la vegetación que hay debajo, lo que provoca temperaturas más bajas. Según el equipo, los resultados fueron menos claros en otros tipos de paisaje, como prados, campos y asentamientos.
Para el estudio, se analizaron unas 180 localidades de Baviera para determinar cómo se relaciona el momento del despertar primaveral con el número y la diversidad de insectos de ese año. Los científicos utilizaron datos satelitales de 2017 a 2019, así como trampas para insectos.
Otro estudio demuestra la correlación
Un estudio presentado en septiembre también estableció un vínculo entre el declive de los insectos y el cambio climático. Según el estudio, una acumulación de condiciones meteorológicas desfavorables influyó notablemente en el declive observado de insectos voladores en Alemania en las últimas décadas. El equipo de investigación dirigido por Jörg Müller, de la Universidad de Würzburg, informó en la revista Nature de que los datos meteorológicos analizados concordaban con el descenso del número de insectos.
Sin embargo, el estudio suscitó controversia entre los investigadores. Se insistió en que los resultados no deben interpretarse en modo alguno como si los fenómenos meteorológicos pudieran explicar por sí solos la drástica pérdida de biomasa de insectos de las últimas décadas. Una influencia importante de la meteorología no significa que no influyan también otros factores, como el uso de pesticidas y los cambios en el uso del suelo.
Reducción del 75
En 2017, un equipo dirigido por Caspar Hallmann, de la Universidad Radboud de Nimega (Países Bajos), analizó datos de entomólogos de Krefeld y constató una drástica disminución de la masa de insectos voladores en algunas zonas de Alemania. Según el estudio, la masa total disminuyó más de un 75% entre 1989 y 2016. Las principales causas hasta la fecha han sido factores como la intensificación de la agricultura y la pérdida de hábitat.
En el estudio actual han participado científicos de la Universidad Técnica de Múnich (TUM) y de las universidades de Würzburg, Bayreuth y Weihenstephan-Triesdorf.
Fuente: www.dpa.com