Bin Laden, Hamás y el hombre del dinero sudanés
Los negocios de Abdelbasit Hamza, vinculado por EEUU a Osama Bin Laden, abarcan dos décadas e incluyen una firma chipriota, una inmobiliaria española, un negocio egipcio de oro y una empresa con sede en Sudán sancionada por EEUU menos de una semana después de los atentados del 7 de octubre.
Fue detenido en 2019 en Sudán tras la caída del dictador Omar Al-Bashir y encarcelado por manejar dinero de Hamás, entre otros cargos. Pero solo fue sancionado por Estados Unidos después del asalto del grupo militante contra Israel el 7 de octubre.
La CNN, en colaboración con la plataforma de investigación israelí Shomrim y el Consorcio Internacional de Periodismo de Investigación (ICIJ), ha desvelado detalles de la cartera de negocios de Hamza en Europa, parte de una red de activos globales cuyo valor, según estimaciones anteriores de funcionarios sudaneses anticorrupción, superaba los 2.000 millones de dólares.
Las nuevas revelaciones se producen en el contexto de las acusaciones de los críticos de que Israel y Estados Unidos subestimaron la amenaza que suponía Hamás y no hicieron lo suficiente para frenar su red mundial ilícita de intereses empresariales.
Hamza, que salió de prisión en 2021 tras un golpe militar que derrocó al gobierno sudanés posterior a Bashir, niega cualquier implicación en la financiación de Hamás. En una respuesta escrita a CNN, también negó cualquier relación con Osama Bin Laden. Hamza dijo que había sido un "preso político" y afirmó que fue liberado por las autoridades sudanesas en junio de 2021 porque era "completamente inocente."
Udi Levy, que sirvió como oficial de inteligencia en las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) durante 30 años, afirma que informó al primer ministro Benjamin Netanyahu en 2015 sobre la amenaza que suponían las redes de financiación de Hamás, pero que fue ignorado. El hecho de que Israel y Estados Unidos no actuaran antes contra Hamza es "un gran descuido", dijo Levy en una entrevista con Shomrim, la plataforma de investigación.
El gobierno israelí niega que sus acciones de los últimos años hayan fortalecido a Hamás. Preguntado sobre si la financiación proporcionada por Hamza fue decisiva en el atentado del 7 de octubre, Ophir Falk, asesor de política exterior de Netanyahu, declaró a la CNN: "Como hemos reiterado, esta cuestión y muchas más se examinarán después de la guerra. El gabinete de guerra del Primer Ministro ordenó a las IDF que destruyeran a Hamás y liberaran a los rehenes. Israel está plenamente centrado en cumplir esas misiones. Todas las cuestiones se abordarán en su totalidad tras la victoria total".
El Departamento de Estado de EE.UU. no había respondido a una solicitud de CNN para hacer comentarios en el momento de la publicación.
Cómo Hamza hizo su dinero
Los documentos facilitados a la CNN por el ICIJ procedentes de la filtración "Cyprus Confidential " -un conjunto de más de 3,6 millones de documentos analizados por el ICIJ y 68 medios de comunicación asociados, entre ellos Shomrim- muestran que Hamza figura como propietario de una participación en Matz Holdings, una empresa chipriota constituida en febrero de 2005. Desde su fundación, Matz Holdings ha sido titular de una lucrativa concesión para explotar dos minas de oro en Egipto.
Hamza vendió una parte sustancial de sus acciones en Matz Holdings el día antes de la destitución de su aliado, el ex dictador sudanés Omar Al-Bashir en 2019, pero aún posee una participación del 10% en la empresa. Hamza también es propietario de una empresa inmobiliaria española, afectada por sanciones estadounidenses dirigidas a "activos en la cartera de inversiones de Hamás" aproximadamente una semana después de que se impusieran sanciones al propio Hamza.
Hamza posee su participación en Matz Holdings a través de Zawaya Group for Development and Investment, una empresa con sede en Sudán que también fue sancionada por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos en octubre por estar vinculada a la cartera de inversiones de Hamás.
El Departamento del Tesoro le acusó de tener "vínculos de larga data con la financiación del terrorismo" y dijo que tenía lazos históricos con empresas de Sudán que habían estado asociadas con Bin Laden, que vivió en Sudán durante la década de 1990.
Jakob Bliggenstorfer, socio de Hamza en Matz Holdings, fue contactado para que comentara las sanciones estadounidenses por la empresa suiza de medios de comunicación Tamedia, que forma parte del consorcio "Cyprus Confidential" del ICIJ. Bliggenstorfer negó a Tamedia que Hamza tuviera vínculos con Hamás y describió las sanciones que se le habían impuesto como "un caso de identidad equivocada".
En noviembre, el Reino Unido también sancionó a Hamza, pero aún no ha sido sancionado por la Unión Europea.
Hombres en la sombra
Tras el mortífero atentado de Hamás contra Israel el 7 de octubre, en el que los militantes mataron a 1.200 personas y tomaron a más de 240 rehenes, en Israel y en todo el mundo se cuestiona que no se haya conseguido neutralizar la amenaza del grupo respaldado por Irán.
Netanyahu se ha enfrentado a acusaciones de que subestimó a Hamás, con consecuencias mortales. CNN y Shomrim han informado anteriormente de cómo Netanyahu permitió que Hamás recibiera millones de dólares en maletas llenas de dinero. Proporcionado por Qatar por razones humanitarias, la dificultad de controlar sumas tan grandes de dinero en efectivo suscitó preocupación en el propio Gabinete de Netanyahu, entre otros funcionarios.
Evidentemente, las redes de financiación del grupo siguen siendo un tema especialmente polémico para Israel. Las FDI dijeron el martes que habían matado a un palestino acusado de ser un destacado financiero de Hamás como parte de una operación para "desmantelar la línea de financiación de Hamás".
Levy, el ex oficial de inteligencia de las FDI, que dirigió la unidad económica del Mossad "Zalzal" hasta 2016, caracterizó a Hamza como uno de un grupo de "hombres en la sombra" que manejan esas redes de dinero en nombre de Hamás.
"En los últimos años, él [Hamza] se ha convertido en una figura central en la cartera de inversiones de Hamás", responsable de "docenas de empresas -aparentemente legítimas" cuyos ingresos son "con el propósito de financiar las operaciones del movimiento, incluida su actividad militar", dijo Levy, en una entrevista con Shomrim.
Demasiado tarde
Las autoridades sudanesas detuvieron a Hamza en abril de 2019, inmediatamente después de la caída de Bashir del poder. Los bienes de Hamza fueron confiscados por los gobernantes civiles de Sudán. El nuevo grupo de trabajo anticorrupción del país acusó a Hamza en febrero de 2021, entre otros cargos, de enriquecimiento ilícito y sospechoso, blanqueo de capitales, corrupción y financiación del terrorismo. Hamza fue condenado posteriormente a 10 años de prisión.
Tras un golpe militar en Sudán en octubre de 2021, Hamza fue uno de los varios aliados de Bashir excarcelados y se revocó la confiscación de sus bienes. Antiguos funcionarios sudaneses afirman que esto permitió que se escapara otra oportunidad para detener a Hamza -y a Hamás-.
"Nos dimos cuenta rápidamente de que gran parte de la red financiera de Abdelbasit era grande y compleja", declaró a la CNN Mohamed Al-Faki Suleiman, ex jefe en funciones de la comisión civil anticorrupción de Sudán. "Inversiones en petróleo, hoteles, marketing, contratación de servicios" y adquirió ilegalmente "millones de acres de tierra".
Al-Faki dijo que cientos de millones de dólares de los activos de Hamza todavía se mantienen fuera de Sudán, a pesar de que el grupo de trabajo de Sudán ha señalado los fondos a las autoridades de Estados Unidos y Europa en 2019.
Al-Faki dice que lamenta que Estados Unidos y otros países no hayan actuado sobre la base de los hallazgos de Sudán. "Todo lo que descubrimos resultó ser 100% cierto", dijo Al-Faki. "Las sanciones estadounidenses llegaron demasiado tarde".
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Fuente: edition.cnn.com
