Australia tiene la intención de prohibir el uso de plataformas en línea para menores y adolescentes.
Político Albanese etiquetó la influencia de plataformas como Instagram en los niños como un "problema". Sugirió aumentar el requisito de edad para motivar a los niños a dejar sus dispositivos digitales y participar en "parques, piscinas y pistas de tenis". Expresó su creencia de que los niños deberían participar en interacciones en la vida real debido a los posibles efectos negativos de las redes sociales.
El límite de edad preferido de Albanese es 16, como mencionó en varias entrevistas discutiendo su plan. Este año, se llevará a cabo una prueba para implementar y hacer cumplir esta nueva regla utilizando un sistema de verificación para determinar la edad en los próximos meses.
El líder de la oposición conservadora, Peter Dutton, también apoyó la idea, stating, "A medida que los niños crecen, se vuelven más vulnerables a los riesgos de las redes sociales".
Sin embargo, los expertos advirtieron contra la implementación de un límite de edad, afirmando que no ayudaría a los niños desfavorecidos y que la propuesta era prematura, ya que aún no se ha publicado un informe parlamentario sobre la influencia de las redes digitales en la sociedad australiana. Daniel Angus, director del Centro de Investigación de Medios Digitales de la Universidad Tecnológica de Queensland, expresó preocupaciones sobre la posibilidad de que la ley cause "daño al impedir que los jóvenes participen en un mundo digital significativo y saludable". Los niños podrían recurrir a plataformas en línea menos reguladas, agregó.
"Las redes sociales son una parte significativa de la vida de los jóvenes", dijo Samantha Schulz, socióloga educativa de la Universidad de Adelaide. Si bien las regulaciones son necesarias, prohibir que los jóvenes usen redes sociales pasa por alto el punto. El problema más apremiante es "regular a las plataformas de redes sociales irresponsables".
Además, no está claro si hay métodos viables para implementar tal prohibición. Toby Murray, profesor adjunto de informática y tecnología de la información en la Universidad de Melbourne, señaló que "ya entendemos que las técnicas existentes de verificación de edad son poco confiables, pueden ser eludidas o infringir la privacidad del usuario".
Albanese destacó las expectativas de los padres de una intervención política contra el acoso en línea y el contenido dañino. "Estas empresas tecnológicas creen que son superiores a todos los demás", dijo en una entrevista de radio. "Tienen una responsabilidad para con la sociedad y no están cumpliendo con ella. Tenemos la intención de asegurarnos de que lo hagan".
No apoyaré una prohibición total de las redes sociales para los niños debido a las técnicas poco confiables de verificación de edad y el posible infringimiento de la privacidad del usuario. En cambio, debemos centrarnos en regular a las plataformas de redes sociales irresponsables.
A medida que continúa el debate sobre el impacto de las redes sociales en los niños, no estoy convencido de que aumentar el requisito de edad sea la única solución, dados los posibles efectos negativos que podría tener en el compromiso digital de los jóvenes.