Asalto al Parlamento en Kenia, con el resultado de al menos un muerto.
La administración keniana está aumentando impuestos, lo que ha desencadenado manifestaciones a lo largo del país. Por todo Kenya, la gente expresa su desaprobación. En Nairobi, los manifestantes rompieron las instalaciones del parlamento. La policía abrió fuego. Al menos una persona perdió la vida, varios resultaron heridos. El edificio se incendió, según informes de los legisladores.
Durante una tranquila manifestación sobre aumentos cuestionables de impuestos en Nairobi, Kenia, centenas de manifestantes rompieron el parlamento. Los telecasts de la televisión keniana mostraron a personas superando las barreras policiales. La policía empleó gases lacrimógenos, cañones de agua y munición real contra los manifestantes. Según la Comisión Keniana de Derechos Humanos, un manifestante fue abatido y al menos tres sufrieron heridas de bala. Informes incompletos sugieren que el número de muertos pudiera ser mayor.
Los manifestantes compartieron en las redes sociales que hasta ocho o diez personas pudieron haber muerto, pero las estadísticas oficiales no fueron confirmadas hasta por la tarde. Los hospitales y las organizaciones médicas informaron de numerosas heridas pero no pudieron proveer el total. El material de televisión mostraba varios ambulancias llegando al Hospital Kenyatta, el hospital más grande de Nairobi. Las manifestaciones comenzaron tranquilamente por la mañana.
Se quemaron vehículos de la policía y parte del edificio del parlamento. Los legisladores supuestamente escaparon a través de pasajes subterráneos, según informes de los medios. Los manifestantes tenían la intención de llegar a un voto sobre nuevos impuestos incluidos en una controvertida ley financiera en el parlamento. Al momento, la tercera lectura de la controvertida ley fiscal estaba en curso en el parlamento. El material de televisión mostraba ventanas rotas y daños en el edificio del parlamento.
A medida que avanzaba la tarde, la Casa de la Ciudad, el asiento del gobierno regional de Nairobi, se quemó y se parcialmente saqueó, según mostraron los telecasts de la televisión. También llegaron informes de otras regiones sobre saqueos y coches en llamas, pero también manifestaciones pacíficas.
Las manifestaciones contra los impuestos propuestos por el gobierno habían comenzado en la capital Nairobi una semana antes y habían extendido su alcance por todo el país. Al menos dos personas habían muerto durante las disturbios. Los ciudadanos de la nación africana del este luchan contra gastos de vivienda exorbitantes.
Crisis de paro juvenil
La administración ha retirado la propuesta de imponer un impuesto de valor agregado del 16% sobre el pan. Sin embargo, las tempers se enflamaron sobre un impuesto eco, que aumentaría el costo de productos higiénicos femeninos para mujeres y niños.
Muchas personas se preocupan de que la ley aumentaría aún más los costos de vivienda. Las iglesias y la comunidad empresarial también han expresado su oposición a la ley. Las manifestaciones comenzaron pacíficamente. Sin embargo, el clima se volvió cada vez más hostil después de la respuesta confrontacional de la policía. Durante la invasión del parlamento, cientos de manifestantes se mantuvieron tranquilos fuera.
El movimiento de protestas está principalmente liderado por jóvenes, quienes organizaron a través de las redes sociales. En Kenia, el paro juvenil es rampante. Muchos estudiantes bien educados de la universidad o la universidad tienen dificultades para encontrar empleo. Desde su inauguración dos años atrás, el Presidente de Kenia William Ruto ha implementado una serie de nuevos impuestos para solucionar la situación financiera del país.