- Activistas atrapadas en el aeropuerto: consecuencias
Dos activistas de la iniciativa climática "Last Generation" se pegaron al aeropuerto de Stuttgart. La policía retiró a las dos mujeres, de 23 y 27 años, del suelo por la mañana y las tomó bajo custodia, informó un portavoz de la sede de la policía de Reutlingen a petición. Los activistas habrían ofrecido resistencia.
Las acciones de "Last Generation" también tuvieron lugar en los aeropuertos de Berlín-Brandeburgo, Colonia/Bonn y Núremberg. En Núremberg, el tráfico aéreo se suspendió initially pero luego se reanudó. En Colonia/Bonn, la operación de vuelo se detuvo temporalmente debido a la protesta, según informes de la policía.
"Dos personas con chalecos amarillos de advertencia expresaron pacíficamente su resistencia exhibiendo pancartas con las inscripciones 'El petróleo mata' y 'Firma el tratado'", informó la organización en un comunicado. "Las pistas no fueron ingresadas".
Last Generation exige una protección climática radical, incluyendo la renuncia completa al carbón, petróleo y gas. Piden la conclusión de un tratado internacional en tal sentido. Desde principios de 2022, el grupo ha organizado bloqueos de calles donde los participantes se han pegado. Sin embargo, han anunciado un cambio de estrategia y ya no utilizarán este método en el futuro. Los activistas climáticos también han llevado a cabo varias acciones en aeropuertos, incluyendo el aeropuerto de Fráncfort, el más grande de Alemania, a finales de julio.
La asociación de aeropuertos ADV exige una respuesta contundente a las acciones de "Last Generation" en varios aeropuertos alemanes. Las acciones son "un acto coordinado de chantaje criminal", dijo el CEO de ADV, Ralph Beisel. "Esto no es una protesta pacífica y no se trata de supuestos objetivos más altos. Son interferencias malintencionadas en el tráfico aéreo y los derechos personales de cada viajero que no puede abordar su vuelo como estaba planeado".
Según el sindicato de policía DPolG, los activistas climáticos deben ser responsables financieramente de cualquier daño resultante de sus acciones en los aeropuertos. La DPolG considera que el daño causado por las cancelaciones de vuelos y las interrupciones en las operaciones de las aerolíneas es responsabilidad de los activistas. Deben cubrir estos costos, dijo Ralf Kusterer, vicepresidente federal y estatal de la DPolG en Baden-Württemberg.
"Los que deliberadamente paralizan la infraestructura utilizando su cuerpo como una barrera insuperable y actúan sin tener en cuenta los derechos y intereses legales afectados, actúan en contra de la moral", dijo Kusterer. Esta inmoralidad proporciona una base para reclamaciones de derecho civil. Además, los "pegadores climáticos" deben ser procesados y acusados de incurrir en costos adicionales por el despliegue de la policía y la eliminación de las interrupciones.
Protesta solo el fin de semana
Solo el sábado, activistas del grupo climático protestaron pacíficamente en el aeropuerto de Stuttgart. Hubo una protesta registrada de 14 personas en la Terminal 3, según informó la policía. La acción, que tuvo lugar sin incidentes, se dirigió contra los recientes registros de apartamentos de miembros de "Last Generation".