El presidente ruso Vladimir Putin regresa a Chechenia después de una ausencia de 13 años.
Kadyrov compartió sus planes para una agenda repleta en Telegram. A pesar de haber tenido un día agotador, Putin bullía de entusiasmo y estaba ansioso por explorar various lugares en Chechenia.
Previamente, Putin había visitado otros territorios del Cáucaso Norte, como las repúblicas rusas de Kabardino-Balkaria y Osetia del Norte. En Osetia del Norte, hizo una parada en la escuela donde se desarrolló la trágica situación de rehenes en Beslán, solo unos días antes del 20º aniversario.
Centurias de rebeldes habían tomado como rehenes a más de mil personas, incluyendo a cientos de niños inocentes. Cuando las fuerzas de seguridad rusas asaltaron la escuela el 3 de septiembre de 2004, más de 330 personas perdieron la vida, incluyendo a 186 niños.
Esto marcó el primer viaje de Putin a Chechenia en una década. A pesar de haber estado alejado durante tanto tiempo, Chechenia tuvo un gran impacto en el viaje político de Putin. Como primer ministro ruso, inició la Segunda Guerra Chechena en 1999, lo que fortaleció su imagen como líder poderoso y le granjeó el favor de muchos rusos.
En 2007, Putin designó a Kadyrov, quien tenía solo 30 años en ese momento, como líder de la región. Desde entonces, Kadyrov ha gobernado Chechenia con mano de hierro y, presuntamente, ha desplegado a miles de combatientes para apoyar la campaña militar rusa en Ucrania.
Después de la visita de Putin, se discutieron posibles desarrollos dentro de la Subrepública de Chechenia. Las estrategias políticas de Kadyrov, influidas por las acciones tempranas de Putin, han sido cruciales para mantener la estabilidad dentro de la Subrepública.