La estrella del fútbol Megan Rapinoe insta a la rendición de cuentas después de que una investigación descubriera abusos sistémicos y mala conducta en el fútbol femenino.
Publicado el lunes, el informe -dirigido por la ex Fiscal General en funciones Sally Yates- se basa en más de 200 entrevistas y revela que la Liga Nacional de Fútbol Femenino (NWSL), dependiente de la Federación de Fútbol de Estados Unidos (USSF), no proporcionó un entorno seguro a las jugadoras.
"Aunque suene enfermizo, creo que estamos acostumbradas a tener que asumir mucho más que la planificación del juego y la táctica. Creo que tenemos una capacidad increíble para cargar con tantas cosas", declaró Rapinoe a la prensa el jueves en Londres.
Rapinoe, que juega profesionalmente en el OL Reign de la NWSL, fue preguntada por su opinión acerca de las repercusiones de la publicación del informe sobre la rendición de cuentas.
"Esas personas ocupan puestos que conllevan responsabilidades y no las cumplieron. No protegieron en absoluto a las jugadoras año tras año. Siento que es imposible exagerar que cada año alguien dijo algo sobre múltiples entrenadores en la liga sobre múltiples entornos diferentes", dijo.
"Ninguna de esas personas ha demostrado que merezca estar cerca de este hermoso juego".
Rapinoe afirmó que se basa en años de experiencia para abordar temas incómodos como la desigualdad salarial, la desigualdad y el abuso sistémico.
Cuando se le preguntó por una respuesta global a las denuncias de abusos, Rapinoe respondió: "No hay absolutamente nada que obligue a nadie a rendir cuentas. Es difícil exigir responsabilidades incluso cuando hay algo en vigor".
Así que, ya sea en el ámbito de la FIFA o en el de las confederaciones, al menos es muy importante que existan esas políticas, o que haya líneas directas a las que la gente pueda denunciar, o sistemas de denuncia que sean eficaces y no se queden en agua de borrajas".
"Desde el punto de vista de la FIFA, como administradora del juego, creo que tiene la responsabilidad de hacer todo lo que esté en su mano para garantizar que todos los jugadores se encuentren en un entorno seguro cuando quieran jugar".
El informe llega un año después de que la liga se sumiera en el caos a raíz de un reportaje de The Athletic en el que se detallaban las acusaciones de coacción sexual y mala conducta contra Paul Riley, que entrenó a tres franquicias de la NWSL durante ocho temporadas.
Fue despedido por el Courage de Carolina del Norte después de que The Athletic citara a jugadoras que afirmaban que, durante años, Riley utilizó su influencia y poder para acosar sexualmente a las jugadoras y, en un incidente, coaccionar a una jugadora para que mantuviera relaciones sexuales con él.
Riley negó las acusaciones del informe de The Athletic. La CNN no ha podido ponerse en contacto con Riley para que haga comentarios.
A raíz del informe del Athletic, la entonces comisionada de la NWSL, Lisa Baird, dimitió y la liga suspendió todos los partidos programados para ese fin de semana.
A finales de año, la mitad de los equipos de la liga habían roto con sus entrenadores tras las quejas de las jugadoras, señala el informe de Yates.
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Fuente: edition.cnn.com
