La bolsa alemana acaba de batir un nuevo récord a pesar de la debilidad de la economía. ¿Por qué?

El día anterior, el DAX cerró en un máximo histórico de 16.533 puntos, que fue superado el miércoles al iniciarse la sesión. A las 6.04 h ET, el DAX había subido un 0,2% y se situaba en 16.570 puntos.

El índice, compuesto por las 40 empresas más valiosas de la mayor economía europea, ha subido de forma más o menos constante desde finales de octubre. A finales de ese mes, las estimaciones oficiales mostraron que la inflación en los 20 países que utilizan el euro se había ralentizado bruscamente, alcanzando su nivel más bajo en más de dos años.

La subida de precios, que había obligado al Banco Central Europeo a un ciclo sin precedentes de subidas de los tipos de interés, se suavizó aún más en noviembre, situándose en el 2,4%.

Las expectativas de los inversores de que los costes de endeudamiento no vuelvan a subir se vieron reforzadas el martes, cuando Isabel Schnabel, miembro del consejo del BCE, descartó de hecho nuevas subidas, citando una "notable" caída de la inflación. Schnabel dijo a Reuters que el banco central está en vías de reducir la inflación a su objetivo del 2%, lo que hace "bastante improbable una nueva subida de tipos".

Lindsay James, estratega de inversiones de Quilter Investors, dijo que el DAX se había visto impulsado por las "buenas noticias sobre la inflación", y señaló que los inversores esperan ahora que el BCE empiece a recortar los tipos ya en marzo.

Las recientes encuestas empresariales, que sugieren que la economía europea podría estar tocando fondo, también han impulsado el índice, dijo en una nota.

La encuesta de directores de compras, que sigue de cerca los sectores manufacturero y de servicios de la zona euro, mostró el martes que la producción se había contraído a un ritmo más lento en noviembre que el mes anterior.

Aun así, las ganancias bursátiles no concuerdan con la frágil situación de la economía alemana, que ha registrado un rendimiento inferior al de otras grandes economías regionales como Francia, Italia y España. El producto interior bruto alemán se contrajo un 0,1% en el tercer trimestre, en comparación con el trimestre anterior.

En la última señal de los problemas de Alemania, los datos oficiales mostraron el miércoles que los pedidos industriales en la potencia manufacturera de Europa cayeron un 3,7% en octubre respecto al mes anterior, desbaratando las previsiones de los economistas de un ligero aumento.

Las empresas alemanas también han "reducido significativamente sus planes de inversión" para este año y el próximo, según una encuesta realizada por el Instituto Ifo entre 5.000 empresas y publicada el lunes.

"El clima de inversión se ha deteriorado notablemente. Es el resultado del aumento de los costes de financiación, la debilidad de la demanda y la incertidumbre sobre la política económica", escribió Lara Zarges, experta económica del instituto, en un comunicado de prensa.