Críticas al "Hot Chip Challenge": el Ministro advierte contra el consumo
Las patatas fritas picantes son todo un fenómeno en Internet, sobre todo por su picor. Sin embargo, a raíz de incidentes, servicios médicos de urgencia y advertencias alimentarias, el ministro de Consumo, Peter Hauk (CDU), hace un llamamiento a niños y jóvenes para que no coman estos chips de tortilla extremadamente picantes y se abstengan de poner a prueba su valor con ellos. Además, en Baden-Württemberg ya no se permite la venta de "Hot Chips". Según el ministerio, ha dado instrucciones a las autoridades inferiores de control alimentario para que "emitan una prohibición de comercialización del producto, independientemente del lote, de acuerdo con el principio de precaución".
"Los campeonatos de comer patatas fritas calientes no son nada nuevo", dijo Hauk. La moda actual del llamado desafío de las patatas fritas calientes es una "exageración muy peligrosa". No sólo los niños y los jóvenes corren el riesgo de lesionarse tanto que tengan que ser hospitalizados. "Por eso hago un llamamiento a los padres para que sensibilicen a sus hijos sobre los peligros de esta prueba de valor", dijo Hauk.
Añadió que la organización de control alimentario también había analizado productos que se probaron durante el "Hot Chip Challenge". "Las patatas fritas calientes son especialmente peligrosas porque el picante de cada una es diferente", dijo Hauk. Sin embargo, el picante no se reconoce.
En el "Hot Chip Challenge", que circula por las redes sociales, los participantes se retan a comer chips de tortilla de maíz especialmente picantes. Hay numerosos vídeos en Internet de personas que participan en la prueba de valor. Muchos de ellos son niños y jóvenes.
El Instituto Federal de Evaluación de Riesgos (BfR) ya había advertido en septiembre contra el consumo de estas patatas fritas y otros alimentos extremadamente picantes. El consumo excesivo de alimentos muy picantes podría provocar "graves problemas de salud". "En el pasado se han notificado repetidamente casos en los que se han observado efectos adversos como irritación de las mucosas, náuseas, vómitos e hipertensión arterial", declaró el instituto. Según la policía, jóvenes de un colegio de Dortmund y del distrito de Garmisch-Partenkirchen sufrieron problemas de salud tras comer una de estas patatas fritas.
Entretanto, también se han retirado lotes de patatas fritas extremadamente picantes en numerosos estados federados, entre ellos Baden-Wurtemberg. La sustancia procede de la guindilla.
Fuente: www.dpa.com